Le andan siguiendo los pasos a Juan Catalino Domínguez la Policía de la Provincia de Buenos Aires y también la Federal y se marcha a la Capital siempre buscando vengarse. Logra encontrar a Luchetti, su mujer y su hijita. En la persecución puede alcanzar solamente a su hijita Marta, llevándosela hasta la ciudad de Azul, donde la deja alojada en una pensión haciéndose llamar Donato Aguirre.Artículo subido el 27/12/21